La primera edición del Festival Arre, reunió más de 70 mil personas por día.
En su primera edición, el Festival Arre convirtió este fin de semana a la Curva 4 del Autódromo Hermanos Rodríguez de la Ciudad de México en una enorme pista de baile para celebrar la música regional mexicana con algunos de los solistas y agrupaciones más populares del género en sus diversos estilos.
El evento reunió a poco más de 140.000 asistentes, según cifras de la promotora Ocesa.
El público disfrutó de una maratónica jornada musical con shows para todas las edades y gustos, en tres majestuosos escenarios. Con actividades como un toro mecánico, y diferentes sitios alusivos a la cultura norteña donde el público pudo tomarse fotos y videos para compartir en redes sociales, el festín puso a los chilangos a bailar con botas y sombreros texanos. No hubo quien se resistiera a mover el cuerpo a ritmo del mariachi, corridos tumbados, sierreño, tex-mex, cumbia y grupero.
Natanael Cano era el más esperado y estuvo entre los más aplaudidos el día sábado, aunque durante la tarde hubo actos memorables como el de Vivir Quintana cuando invitó al escenario a Camila Fernández — hija de Alejandro Fernández y nieta de Vicente Fernández — para interpretar juntas “Canción sin miedo”, el himno del movimiento feminista en México.
Para el domingo y como estaba anunciando, el encargado de cerrar la cartelera de esta primera edición del Festival Arre, fue Peso Pluma.
Ante un escenario lleno, un público emocionado por ver por primera vez a la también conocida como ‘Doble P’ , el mexicano cumplió con las espectativas de sus fans.
Con su típica pasamontañas, playera de manga larga y un jogger en color negro, el artista saltó al escenario y arranco con uno de sus mejores éxitos para prender a todo el público.
En total, fueron poco más de 12 horas de música y baile sin parar el sábado, y asimismo el domingo. La audiencia, en su mayoría joven, aprovechó para lucir sus mejores atuendos, con una mezcla entre lo urbano y un estilo country. A decir por la respuesta inicial, el nuevo festival se perfila como un favorito en la Ciudad de México, donde la oferta musical es vasta y hay opciones para todos.
